El cupo de ingreso a la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) se mantiene. Por unanimidad, el Consejo Directivo resolvió esta tarde rechazar los planteos formales realizados por padres de los aspirantes que obtuvieron más de 60 puntos pero que no alcanzaron los 82,82 que se fijó como piso. Este año rindieron unos 1.100 aspirantes y en la provincia sólo ingresaron 291.
La sesión extraordinaria realizada este mediodía sólo para tratar este tema se extendió durante cinco horas. Media docena de padres autoconvocados, liderados por Fernando Velloso Colombres, se solidarizaron con las hijas del decano Mateo Martínez, quienes sufrieron intimidaciones durante el fin de semana, y argumentaron los motivos por los que consideran que la Facultad de Medicina vulnera los derechos de sus hijos. Luego de una hora de debate, la totalidad de los consejeros votó para que la sesión pasara a ser secreta.
Cuando rendirse no es una opción: historias detrás de los bochazos en MedicinaEn rueda de prensa, Velloso Colombres insistió con que para ellos la postura de la facultad es inconstitucional y que no respeta la Ley de Educación Superior. “La ley es muy clara en muchos aspectos, sobre todo en que prohibe el examen de ingreso y el cupo, y señala que la universidad es gratuita”, dijo.
El decano de Medicina denunció amenazas por el cupo de ingresoEl vocero de los padres autoconvocados aseguró que continuarán con sus acciones de lucha y calificó como “una gran injusticia” lo que ocurre en la Facultad de Medicina. “No tiene que haber cupo, para nadie. Parece que el Honorable Consejo Directivo no lo comprende. No comprendemos por qué lo tratan en privado, cuando todas las reuniones de Consejo Directivo son públicas. No dejan ingresar a los alumnos y a los padres”, protestó Velloso Colombres.
Hicieron una presentación formal en la UNT para objetar el cupo de ingreso en MedicinaSegún los padres, la facultad está incumpliendo con la Resolución 1685/17 del Consejo Superior de la UNT establece que se debe cumplir con el artículo 7 de la Ley de Educación Superior 24.521, para que el acceso sea libre e irrestricto.
Desde un primer momento, el decano Martínez argumentó que no están dadas las condiciones para un acceso libre ya que se debe respetar el pudor y la confidencialidad del paciente, al tiempo que recordó que existe una ley que lo ampara.